Procure llevar un calendario de crisis y una lista de los medicamentos con las dosis prescritas.
Acuda de forma periódica a su médico para controles hemáticos y niveles plasmáticos de medicación.
No abandone jamás por su cuenta el tratamiento antiepiléptico.
Antes de modificar el tratamiento, consulte a su especialista.
Ante cualquier otra enfermedad, comunique al médico el tratamiento que está tomando.
Haga deportes, pero nunca bruscos o de riesgo (submarinismo, alpinismo ...).
Es mejor hacer deportes colectivos.
No llegue al agotamiento.
Factores desencadenantes y consejos para evitarlos
Trastornos de sueño: privación o disminución. Hay que conseguir un horario regular de sueño. Si esto no es posible, hay que intentar dormir, al menos, 8 horas cada día. Cansancio. Estrés emocional y preocupaciones. Hipoglucemia (disminución de los niveles de azúcar en sangre). Fiebre elevada, especialmente en niños menores de 4 años. Incumplimiento de la toma de la medicación. Centelleos. La menstruación.
El deporte: su restricción puede hacer más daño que beneficio. Son aconsejables los deportes de práctica colectiva.
La TV: la habitación debe estar suficiente y uniformemente iluminada. No mirar de frente cuando se encienda o apague la TV. Ver la TV a 3 m. de distancia y usar el mando a distancia para el cambio de canales.
Videojuegos: usar pantallas protectoras. Que la habitación esté iluminada y no jugar más de una hora seguida.
Ordenador: Conviene tener en cuenta las recomendaciones anteriores.
Discotecas: colocarse de espaldas a los focos de la luz y evitar tener todo el campo visual sometido a los centelleos. Si se producen vómitos y ha transcurrido menos de media hora desde la toma de la medicación, será necesario ingerir nueva dosis. Si se trata de una gastroenteritis aguda, se puede perder una toma, pero si se prolonga, debe administrarse en varias porciones a lo largo del día (cada dos horas en cucharadas de agua). Cuando sea necesario estar en ayunas, puede administrarse doble dosis del fármaco la noche anterior.
Viajes: llevar medicación suficiente para todo el viaje y un certificado que confirme la necesidad de dicho tratamiento. Adoptar cuanto antes el horario del lugar para que haya regularidad en las tomas de medicación. Si los que viajan son niños o adolescentes, sin los padres, es importante informar a los responsables del lugar las manifestaciones clínicas y tratamiento. Es muy importante que se responsabilicen de tomar la medicación y evitar exponerse a factores provocadores.
El alcohol: sólo tomar mínimas cantidades de vino. El etanol que contiene algunos excipientes de medicamentos, sí se puede tomar.
Drogas: las personas con epilepsia son muy sensibles a estas sustancias, originando crisis. Se pueden tomar todo tipo de alimentos. Las bebidas gaseosas no deben administrarse con algunos fármacos como el Valproato.
Tabaco: no tiene efecto sobre esta enfermedad.
Manuales PDF
Guía de epilepsia infantil para el paciente y sus familiares o cuidadores